Sinopsis: Una escritora de libros para adolescentes recién divorciada y con problemas con el alcohol decide regresar a la pequeña ciudad donde se crió para volver a conquistar a su amor del instituto. El problema es que él está casado y tiene un niño pequeño. Cuando todo parece ir de mal en peor, Mavis se encuentra con un antiguo compañero de clase que tampoco ha triunfado al terminar el instituto.
Charlize Theron es una escritora de poca monta, que jamás ha dejado de pensar en su ex-novio del instituto, cuando ella era la reina del instituto. En la película nos ensea que, en el fondo, ella no ha cambiado en absoluto, sigue siendo la misma persona que antaño, mientras que el resto de los personajes ha evolucionado o madurado. Ella, sin embargo, no, y gracias a eso ha sido posible vivir de los libros para adolescentes, o JA (Jóvenes Adultos). En la película, Charlize Theron nos brinda, como siempre, una gran actuación, la cual ya nos tiene acostumbrados. En su afán por conseguir a su ex-novio, intenta hacer todo lo posible por reconquistarlo, pues cree que son almas gemelas. La química entre Charlize Theron y Patrick Wilson no es especialmente impactante, como ha de ser según la temática de la película, aunque de parte de Theron si que impacta, cosa que ayuda a la credibilidad de la película, así como el pasotismo que desprende ante todos los que la conocieron en el pasado (incluidos sus padres). Aún así, Patrick Wilson nos ofrece la interpretación que nos ha de brindar en esta película.
Creo que lo mejor de la película es, parte de la genial Charlize Theron, es el personaje de Patton Oswalt, Matt, el típico marginado de instituto que fue vapuleado por los matones de instituto, que tampoco parece haber cambiado en absoluto, al igual que Mavis, el personaje de Theron.
Aunque el ritmo puede ser algo pausado y lento, la película es una genialidad que nos plantea que el primer amor no se nos olvida nunca, así como la búsqueda de la felicidad y la posibilidad de darnos cuenta que, aunque busquemos la felicidad, ésta la podemos tener si nos esforzamos en conseguirla, ya sea como queremos, o adaptándonos a lo que nos depara la vida.
La calidad del guión es excepcional, así como la dirección, pues, según creo, es del mismo equipo creativo que se escondió y creó Juno. Jason Reitman nos brinda otra enorme dirección y producto digno de una película inteligente y hecha con gusto, aunque la temática del argumento no es un Shakespeare, es digna de verse, ya sea por la realización de la misma o por el dialecto directo y actual que nos ofrece.
Una hora y media ha dado para mucho, y creo que desde ahora, Jason Reitman y Diablo Cody han pasado a ser uno de los equipos de cine que más me han gustado (y ha sido por casualidad, pero bendita casualidad)
Lo que más me ha gustado:
Charlize Theron, como siempre. Algo tiene esta mujer, y sus actuaciones que me atraen casi siempre, y en todas las ocasiones me sorprende. Patton Oswald (mejor conocido por la serie "Estados Unidos de Tara") es el complemento perfecto para la poco adulta Theron.
Lo que no me ha gustado:
El ritmo en el que transcurre la película. A diferencia de Juno, producto del mismo equipo técnico, el ritmo se me ha hecho más lento, aunque los actores encajen entre si, como un reloj, y en eso si que son muy buenos Jason Reitman y Diablo Cody (guionista).
Trailer:
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