Sinopsis:
La historia se desarrolla en un Instituto de barrio en el que estudia Emilio, chico tímido y con una media de cinco, cuya verdadera obsesión es Natalia, la chica guapa y lista de la clase, de la que lleva toda su vida enamorado. Cuando el último día de curso por fin se decide a declararse, a Natalie le conceden una beca para estudiar Medicina en Oxford. Todo parece perdido para Emilio, pero sus colegas marginados del Instituto no están dispuestos a rendirse. Le convencen para falsificar expedientes y becas, desembarcando en el tranquilo campus británico liando más de un problema.
Mi Opinión:
Cómo recordarás, querido lector, hace ya algún tiempo que miré su segunda parte, antes incluso de ver ésta, y he de decirte que, en cierto sentido, tenía ganas de verla, sobretodo por las inconcruencias que encontré en su segunda parte. Sin embargo, el reclamo que la película original tenía, eran Mario Casas y Amaia Salamanca, y al pasar un buen rato con la segunda, era de cajón que no me disgustaría ver su primera parte, y hoy, por fin lo he hecho.
Para empezar, el desarrollo de "Fuga de Cerebros" puede ser la típica película romántica-cómica-adolescente española. El Chico que le gusta a la chica desde siempre pero no se atreve a decírselo, el chico marginado se ajunta con otros marginados (un ciego, un gitano, un paralítico y un gay (si, parece un chiste, pero no lo es)). La chica se va a Oxford a estudiar, y los amigos le convencen para seguirla y estudiar todos en Oxford, solo para que el chico le confiese que la quiere. Ese punto es original, querido lector.
En mi opinión, a parte de las incongruencias que encontré en su segunda parte (para leer lo que pensé entonces pulsa aquí); ya no solo los altos conocimientos informáticos del gitano para falsificar expedientes, notas, diplomas, becas, etc (coño, que me enseñen como lo hace), sino porque, como se intuye, o tienen recursos para ir a muchos lugares los protagonistas, y ala, de repente, a Inglaterra, a vivir y estudiar medicina, nada menos. Aún así, esas cosas "imposibles" que dice un amigo, pasan por la trama como el motivo gracias al cual, viajan al escenario de esta historia de amor.
Me he reído mucho con esta película (ahora puedo decirte el guiño a la tarta de American Pie), y me ha dejado un buen sabor de boca. Mario Casas está correcto, así como Amaia Salamanca, que si, esta muy buena y nos enseña los pechos (OLE! OLE! Que diría Amador Rivas de LQSA), pero como actriz en algún que otro momento de la película la he encontrado justita.
El grupo de amigos me ha gustado más aquí que en la segunda parte. En parte, supongo, porqué no nos sobrecargan con ellos, y al ser la novedad, no destacan demasiado sobre la trama. He respirado tranquilo cuando el que hace el gitano no hablaba demasiado, así que no me ha cansado tanto como en su segunda parte.
En definitiva, si quieres pasar un rato agradable, sin muchas expectativas para ver una de las grandes películas de la historia, aquí puedes encontrar un rato agradable y digerible, que, sin duda, te recomiendo que leas, querido lector.
Lo que más me ha gustado:
- El polvazo, lo siento, pero ha sido así.
- El argumento de la historia y esos pequeños gags que nos brinda la película.
- La escena de la discoteca, o la del restaurante, o incluso la de necrofilia.
- El gitano no me ha sobrecargado.
- Las familias de los chicos.
Lo que menos me ha gustado:
- Basicamente lo que ya he contado, en algunos momentos encuentro que los actores decaen, pero no en demasía.
- Si es Oxford, ¿por qué solo se encuentran españoles?
- ¿Des de cuando los trenes de Oxford son los de Renfe con una pegatina?
Trailer:
